El hashtag #StopNiñofobia ha vuelto a estar en las redes sociales reaccionando a una serie de actitudes que presenta una parte de la sociedad en la que vivimos.
¿Cuáles son esas actitudes y comentarios? ¿Cómo responder a ellos? Todo eso y un poco de humor en esta «Videoguía de respuestas a los principales comentarios de los niñofóbicos». ¡Espero que os sea útil! Ya sabéis, ¡a difundir la palabra!
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=zgHDFX4-Xdg&w=560&h=315]
Un satélite lejano donde colocar a los niños para que no molesten y los veamos solo a través de videocámaras… creo que nos dirigimos hacia esa situación.
Besico, Jefa.
Totalmente. Pero yo de esa vida me bajo. XD
Besicos!
«Lo peor que te puede pasar en un avión es que te toque un niño al lado», o la típica señora que lleva dos litros de colonia barata, o el que se quita los zapatos nada más subir al avión, o el que ve una serie en el portátil sin los cascos, o el que escucha música con los cascos pero está tan alta que es como si nos lo llevara, o el que ocupa plaza y media, o el que habla a gritos con su pareja… ¿Vamos a echar a todos esos también de los aviones? ¿O de los restaurantes? ¿O de los hoteles? Porque en un hotel / restaurante es mucho peor unos guiris de despedida de solteros que una familia con niños.
En fin, que todos estos adultos que tanto se quejan parece que nacieron directamente en la cuarentena y que nunca tuvieron infancia…
Un saludo!
Pues eso, totalmente de acuerdo. Muy mosqueante todo y, sobre todo, el hecho de que parece totalmente justificado que se prohíban niños o que estén mal vistos. En fin…
¡Un abrazo!
Hola! Acabo de descubrir tu blog precisamente por esta entrada. Yo creo que todo se resume asi: vivimos en una sociedad hiper-consumista y egoista donde cada individuo se convierte en un micro-estado con fronteras menos permeables que las de EEUU en la era Trump. O sea: no me molestes para nada, que mi bienestar y mi disfrute son lo mas importante, es mas, que digo, es lo UNICO importante, y si para eso yo debo exigir restaurantes sin hijos, hoteles sin hijos, aviones sin hijos, lo-que-sea-sin-hijos, ¡lo exijo! Y para cumplir dicha exigencia estan nuestros amigos emprendedores dispuestos a proporcionar dichos placeres a precio tal. Y como esto es un negocio en alza y nadie quiere que se le jorobe el chiringuito, pues niño que aparece, niño que es vetado. En definitiva, la niñofobia es una consecuencia mas de este mundo absurdo que no sabe a donde va, como decia aquel.
Pues, Santi, tienes mucha razón. De hecho es así como lamentablemente creo que es. Pero bueno, estas cosas hay que denunciarlas, y tenemos que cargarnos de armas para combatirlas. Y esas armas son argumentos y razones. Así que, ¡a contestarles cada vez que nos suelten algo así! Muchas gracias por comentar 😀