Tailandia con niños: ruta de 16 días y presupuesto

Al igual que hicimos cuando fuimos a Malasia con los niños, que aprovechamos el viaje para ir también a Singapur, en este viaje a Tailandia con niños, en realidad visitamos también Camboya durante 8 días (tanto Siem Reap -Angkor Wat, entre otros- como Phnom Penh). Por tanto, aunque aquí os contemos una ruta por Tailandia en 16 días y presupuesto para viajar por Tailandia con niños, en realidad fueron unos 24 días de viaje.

PREPARANDO EL VIAJE A TAILANDIA CON NIÑOS

Digo «unos» 24 días de viaje porque siempre tengo la duda de si los días de vuelo se cuentan o no. ¿Depende de si ya has pisado destino en el día? ¿De un número mínimo de horas? En casa tenemos siempre ese debate, aunque ambos hemos convenido en llamar «día 0» al día del vuelo inicial. Hasta ahí, sí.

Y es que, claro, lo primero que hacemos al preparar el viaje a Tailandia es, como mínimo, contar los días. Lo cierto y verdad es que estuvimos 24 días fuera de casa, cosa que sabemos que para muchas personas no es fácil. Suerte que, al visitar dos países distintos, Tailandia y Camboya, podemos contaros por separado cómo fue cada uno. Aquí os contamos solo el viaje al primer país.

Eso sí, algo que hicimos que fue común a ambos países fue contratar el seguro de viaje familiar. Ya os hemos hablado de cómo gestionar todo el tema de salud en el viaje, botiquines y vacunas con niños, y os dijimos por qué contratamos el seguro IATI, tras, además, haber tenido que hacer uso de él. Pues aprovechamos para recordaros que tenemos un descuento para vosotros/as por ser lectoras/es de BaM!. Si os interesa contratarlo, echad un ojo, comparad y, si os convence, aquí tenéis un descuento de un 5% si lo hacéis con este enlace:

VIAJAR CON NIÑOS A TAILANDIA

Lo que sí hemos conseguido este año es permanecer en cada ciudad de destino al menos 2 noches y, en algunas, hasta 4. Ya os hemos contado alguna vez que nos cuesta quedarnos quietos en la misma ciudad, pero viajar con niños pequeños (3 y 5 años en el viaje) nos exige «bajar el ritmo».

Otra cosa que nos exige viajar con niños es imaginación para conseguir que les interese todo lo que queremos (los adultos) visitar. Los niños se interesan por lo que tienen a su alrededor, pero a lo mejor su vista se dirige más al escarabajo que hay en el suelo que a los grabados de las ruinas que hay delante.

¿Cómo lo hacemos nosotros? ¡Con el pasaporte lúdico! Por supuesto, este año también hemos hecho el pasaporte lúdico de Tailandia y de Camboya (pegatinas de comidas y transportes aquí, de ciudades y lugares aquí y de mapa final aquí), al cual le hemos incorporado una narrativa muy bonita en la que teníamos que seguir las pistas de un personaje al que llamamos «el viajero lector». En otro artículo esperamos hablaros más a fondo de él. De momento, solamente recomendaros que, por favor, hagáis un pasaporte lúdico para vuestro viaje con niños. En esta biblioteca de pasaportes lúdicos por países tenéis muchas alternativas que descargar de manera gratuita para inspiraros.

PLANIFICACIÓN DE LA RUTA POR TAILANDIA

Nosotros ya habíamos estado en Tailandia en el año 2012 y eso nos facilitó mucho el viaje, pero también es cierto que nos hizo prescindir de visitas que, de no haber ido nunca, sí que habríamos repetido.

Para este viaje, descartamos (aunque os recomendamos muy encarecidamente):

• Ayutthaya: ruinas fantásticas bastante cerca de Bangkok, en un estado de conservación razonable. Muy interesantes y, sobre todo, accesibles desde la capital. Recomendables.
• Sukhothai: ruinas espectaculares en un complejo cuidado que se puede recorrer en bicicleta con toda tranquilidad y que merece la pena incluso en pleno monzón (palabrita de persona empapada en monzón). De haber estado 3 días más, habríamos ido con los niños. Merece mucho la pena.
• Kanchanaburi: y es la segunda vez que lo descartamos, porque tampoco fuimos en la primera ocasión, pero sigue en finalistas esta zona de parques naturales, historia (el famoso puente sobre el río Kwai) y templos.

En su lugar, incluimos dos grandes parques nacionales (Khao Sok y Khao Yai) donde disfrutar en familia de fauna salvaje y paisajes preciosos. Haciendo siempre caminatas cortas y yendo bien hidratados, es más que factible con niños.

Respecto a la preparación más logística y de hoteles, según el nivel de «gama» al que vayáis a viajar, os recomendamos distintos sitios. Desde blogs con viajes para «backpackers» como Mochileros en Tailandia hasta portales con ofertas de alta gama como el sitio de Voyage Privé. Desde luego, en Tailandia la explosión del turismo hace que la oferta sea de lo más variada. Ya lo vimos hace unos años y la tendencia sigue en esa línea ahora.

RUTA DE 16 DÍAS POR TAILANDIA CON NIÑOS

Si queréis ver un videoresumen de menos de 1 minuto por día del viaje a Tailandia en familia, aquí lo tenéis. Es algo que hice como recuerdo personal. Espero que os sirva para ver qué podéis encontrar allí:

Día 1: Vuelos Madrid – Bangkok

El primer día fue el viaje en avión, con parada en Doha, que nos llevó casi un día (unas 16 horas contando la parada). Volvimos a viajar con Qatar Airways porque, además de tener una relación calidad-precio muy buena, la verdad es que también ofrecía de los mejores precios.

BANGKOK TURÍSTICO

Día 2: Bangkok turístico

Llegamos a Bangkok (aeropuerto de Suvarnabhumi) por la mañana temprano, por lo que pudimos aprovechar el día. Después de descansar y comer algo local cerca del hotel, decidimos coger un barco por el río para llegar al Wat Arun (Templo del amanecer). Después, cruzamos en ferry a la otra orilla, donde justo espera el Wat Pho (el Templo del Buda reclinado). Hicimos ambas visitas con la calma que permiten dos pequeños terremotos recién aterrizados y volvimos al hotel.

Día 3: Bangkok turístico

Para el segundo día de visita dejamos el Gran Palacio, que nos maravilló de nuevo, porque es espectacular, si bien había aún más gente de la que recordaba. Aviso importante: si vais a ir, llevad pantalón largo y, como mínimo, camiseta de manga corta (de lo contrario, os harán comprar ropa allí mismo). Y evitad las horas de más calor.

Justo al lado del Gran Palacio, está el Saranrom Park, un parque grande con su estanque y sus peces, con sus varanos y con una zona infantil de columpios, que nos vino fenomenal. A la vuelta, pasamos por Khaosan Road para vivir su ambiente y cenamos por la zona, volviendo a casa en tuk tuk.

KOH LANTA

Día 4: Bangkok – Koh Lanta

Realmente, al cuarto día nos fuimos a Siem Reap (Camboya), pero vamos a continuar aquí 8 días después, cuando despertamos (de nuevo) en Bangkok para viajar a Koh Lanta. Cogimos un avión Bangkok-Krabi por la mañana y reservamos en 12Go Asia un taxi de Andaman para ir en taxi desde Krabi hasta Koh Lanta. Por cierto, podéis pedir sillas para niños para el taxi/van, os lo recomendamos.

En julio, que fue cuando fuimos, es temporada de lluvias, por lo que nos llovió (mucho) aun en la playa. De hecho, nuestro hotel estaba inundado y nos cambiaron a otro en primera línea de playa. ¡Ni tan mal! No es que a los niños les importara lo más mínimo, así que igualmente disfrutamos de la arena, de la ausencia de gente, de las olas, de la piscina, de la comida…

Día 5: Koh Lanta

Otro día de lluvias, playa, olas, juegos de mesa, comida deliciosa, piscina, animales, más playa, más lluvia, más juegos de mesa… Estábamos situados a la altura de Klong Nin Beach, más bien hacia el sur, porque las playas tienen la arena más fina.

Por el tiempo atmosférico y porque estábamos muy a gusto (y, recordad, ya llevábamos casi 2 semanas de viaje encima, aunque no lo parezca aquí), decidimos no movernos de la zona más que para dar pequeños paseos. No obstante, por si os sirve, nos habíamos propuesto, si nos aburríamos, visitar:

• Poblado Chaoe Ley de Sang-ga-u: conocido como el poblado de los nómadas «gitanos de mar», que aún mantienen su forma de vida.
• Koh Lanta Old Town: pequeña población multicultural con mezquitas, templos budistas y chinos, que originalmente estaba habitada por mercaderes árabes y chinos.
• Parque Nacional de Koh Lanta: dos playas con un faro y un camino (con monos) de unos 2 kilómetros. Leímos buenas y malas reseñas, pero creemos que nos habría gustado.

PARQUE NACIONAL DE KHAO SOK

Día 6: Koh Lanta – Krabi – Parque Nacional de Khao Sok

Nos despertamos, disfrutamos de la playa y salimos a media mañana en taxi hacia el norte de nuevo. Contratamos con la compañía hacer una parada en Krabi para comer (a las 2 horas y algo), y también dos paradas: el Templo Blanco (Wat Kaew Korowaran, omisible) y el Wat Bang Thong, que si tenéis oportunidad de verlo, está bastante bien. Continuamos el camino y llegamos 2 horas y media después hasta nuestro alojamiento en el Parque Nacional de Khao Sok.

Día 7: Parque Nacional de Khao Sok

Nuestro primer gran parque, ideal para practicar trekking con excursiones organizadas o por tu cuenta. Nosotros llevamos siempre la aplicación gratuita Maps.me cuando viajamos, que nos permite situarnos en el mapa con el GPS sin internet. Así que fuimos solos siguiendo una ruta bien señalizada, paralela al río, hasta llegar a la Wing Hin Waterfall (la primera cascada), y luego volver. Hasta este punto es accesible para hacerlo con peques, con desniveles asumibles, aunque si no estáis en forma, acabaréis cansadas/os (como nosotros, aunque en mi caso he de decir que porteaba al peque).

El resto del día dimos un paseo por las calles de la entrada al parque (hay poco que ver, pero es agradable), jugamos, descansamos y contratamos allí mismo un taxi que nos llevara al Lago al día siguiente.

Día 8: Parque Nacional de Khao Sok (Lago Cheow Lan) – Chiang Mai

Nos despertamos y recogimos para ir al Lago Cheow Lan (a 1 hora de la zona de jungla). Una vez en el embarcadero, contratamos una ruta corta en lancha por el lago (de 2 horas aprox., por 2000 BHT, unos 60€) que, a pesar de ser artificial, tiene unas vistas realmente bonitas. Merece la pena.

Después de comer, nos recogió una minivan que habíamos contratado también por 12Go Asia, hasta el aeropuerto de Surat Thani. Esa tarde-noche volamos a Chiang Mai.

CHIANG MAI

Día 9: Chiang Mai

Fue un intenso y bonito día de turismo por la preciosa ciudad de Chiang Mai, visitando varios de sus templos. Visitamos el precioso y afamado Wat Chiang Man y el sorprendente Wat Lok Molee (no es tan famoso pero me parece muy recomendable).

Después de un descanso en el parque público Buak Hard (recomendable para peques), fuimos al Wat Sri Suphan o Templo de Plata (Silver Temple) que es, al parecer, una maravilla. Eso me dijeron mi marido y mis dos hijos, porque a mí, por ser mujer, no me dejaron entrar. Está prohibida la entrada a mujeres.

Día 10: Chiang Mai – Elephant Nature Park

Hicimos un viaje a Elephant Nature Park, un lugar donde se acogen y protegen elefantes que estaban siendo maltratados en otros lugares turísticos, zoos o por empresas. También acogen perros y gatos, cosa que nos terminó de convencer. Hicimos visita completa de mañana y tarde, comiendo allí, y fue, la verdad, muy bonito y muy emocionante. Eso sí, van muchas personas a visitarlo, pero eso no impide tener muchos buenos momentos.

Día 11: Chiang Mai

Paseamos por la ciudad antigua, disfrutando de sus calles y entrando en algunos templos. Encontramos cerrado el Wat Phan Tao, aunque lo vimos por fuera. En el caso del Wat Inthakhin, como mujer, también tuve prohibida la entrada al santuario, pero visitamos el resto. También fuimos al Wat Chedi Luang, que nos pareció enorme y muy digno de ver.

Paramos a comer en un lugar de lo más especial que descubrimos y que os recomendamos mucho: el Miranda’s Café. Un lugar fantástico para familias, con multitud de juguetes, juegos y recuerdos que os encantarán a todos. Dan ganas de pasar el día entero allí, es muy acogedor.

Por la tarde, fuimos al Wat Phra Singh, un templo también muy recomendable y muy tranquilo, con mensajes en los árboles del jardín.

PARQUE NACIONAL DE KHAO YAI

Día 12: Chiang Mai – Parque Nacional de Khao Yai

Tomamos un vuelo pronto de Chiang Mai a Bangkok (aeropuerto de Don Mueang). En el aeropuerto, cruzando por el hotel, se accede a la estación de tren. Cogimos uno Express que tardó algo más de 3 horas (eternas, fue muy incómodo ese tren de Tailandia con niños) hasta Pak Chong.

Desde ahí, nos recogió un taxi que nos llevó en algo menos de 1 hora a nuestro alojamiento, con quien teníamos contratada la estancia (Greenleaf Guesthouse & Tour, muy recomendable) en el Parque Nacional de Khao Yai. Estábamos agotados del trayecto, así que el resto del día solo descansamos y jugamos por la zona.

Día 13: Parque Nacional de Khao Yai

Sin lugar a dudas, uno de los días más maravillosos de este viaje a Tailandia con los niños. Fue agotador, realmente, pero muy bonito. Vimos una diversidad de flora y de fauna tremenda, gracias al guía: serpientes, monos, insectos de todo tipo, mariposas, aves, ardillas gigantes, ciervos, tortugas, arañas, lagartos, escorpiones, ranas…

Intentamos avistar elefantes salvajes pero no fue posible. Comimos en mitad de un río, donde mi hijo mayor, parándose después de todo lo vivido (y lo que faltaba), dijo: «Este viaje es increíble, chicos».

BANGKOK

Día 14: Parque Nacional de Khao Yai – Bangkok Moderno

Dado que no queríamos pasar otra vez por meter a los niños en el tren, decidimos acordar transporte privado («taxi») de vuelta a Bangkok y tardamos poco más de 2 horas en llegar.

Comimos cerca del alojamiento y cogimos un barco -esta vez por los canales- la estación de National Stadium, donde tomamos el skytrain hasta bajar en Sala Daeng, para ir al Parque Lumphini. Solamente por ver esta zona moderna de Bangkok ya merece la pena, pero además en el parque lo pasamos genial. Tiene una amplia zona para niños.

Día 15: Bangkok

Por la mañana fuimos a visitar el gran Buda de oro del Wat Traimit. Desde ahí, estuvimos bastante rato paseando por la zona de Chinatown, recorriendo sus calles, tiendas y templos y dejándonos cautivar por sus colores, sonidos y olores.

Después de comer, sin prisa, volvimos en tuk tuk al alojamiento y, de nuevo, descansamos y disfrutamos de estar juntos de vacaciones en familia.

Día 16: Bangkok – Madrid

Nada más levantarnos fuimos al aeropuerto, donde desayunamos. El día (un día de muchas horas despiertos) transcurrió entre aviones, aeropuertos (parada de vuelta en Doha), pelis, juegos de cartas, videojuegos, comidas… y vuelta a casa. Eso sí, los peques hasta arriba de jet lag.

Día extra

Si veis el vídeo que hemos subido, podréis ver que hay un «capítulo extra» que hicimos en Madrid. Y es que el «desenlace» del pasaporte lúdico tenía que ver con ese personaje del que os hablamos arriba, el viajero lector, que mediante el código QR que insertamos, nos llevó a un punto de Madrid, donde encontramos la estatua que le representaba.

De este modo, les decíamos a nuestros hijos que viajar lejos es maravilloso, pero que muy cerquita de nosotros también se esconden lugares fantásticos.

PRESUPUESTO PARA VIAJAR A TAILANDIA CON NIÑOS

Como os hemos indicado, es difícil computar el presupuesto por separado de Tailandia, porque fuimos también a Camboya en el mismo viaje. Dado que usamos los mismos vuelos internacionales para ambos, hacemos como en el artículo de presupuesto del viaje a Malasia: computaremos por un lado los vuelos internacionales y, por otro, los gastos de Tailandia.

CARACTERÍSTICAS DEL VIAJE

Para empezar, tenemos que indicar que los gastos que aquí indicamos son exactos respecto a lo que gastamos en este viaje. No son aproximados. Ahora bien, nuestro viaje, para que os hagáis una idea, tiene estas características, para que veáis si vosotros/as iréis por encima o por debajo en gastos:

• Número de personas: 4 (2 adultos, un niño de 5 años y medio y un niño de 3 años).
• Tipo de viaje: mochilero por libre (con algunas comodidades, especialmente el uso de vuelos internos).
• Tipo de comidas: normalmente de puestos o restaurantes o similares, muy asequibles, pero ocasionalmente en cadenas de comida rápida/internacional.
• Tipo de alojamientos: normalmente habitaciones triples o cuádruples (una individual para el mayor y una cama doble para Mr. B, el peque y para mí) en hoteles de 3 estrellas y alguna cabaña u hospedaje más low cost.

GASTOS DIARIOS Y TOTALES EN TAILANDIA

Y estas son las cifras, incluyendo un gasto diario medio (dividiendo entre 18 días) y no computando en el gasto diario total el vuelo internacional, ya que es un gasto fijo e independiente del número de días del viaje (el seguro de viaje sí es proporcional):

*Los transportes excluyen vuelos internacionales, pero incluyen taxis (los que contratamos allí y los que contratamos vía 12go Asia), barcos y vuelos internos.

**Los otros gastos incluyen “caprichos” tipo helados, souvenirs o similar, así como el precio de las tarjetas SIM, botiquín para viajar con niños y otros gadgets para viajar. En este caso no incluye la compra de la guía de viaje, porque lo estuvimos preparando antes cogiendo de la biblioteca varias guías (entre ellas, la Lonely Planet, que recomendamos siempre).

PENSAMIENTOS FINALES Y LECCIONES APRENDIDAS

Viajar a Tailandia con niños es muy sencillo. Las facilidades que tienen en destino y la enorme oferta de turismo que existe, es muy variada. Además, las personas de Tailandia son muy amables con las familias con niños/as y eso siempre es de agradecer, aunque algunos/as peques con mucha timidez quizás sientan demasiados ojos sobre ellos/as.

El viaje a Tailandia no es barato, aunque el destino en sí lo sea, porque los vuelos internacionales no están al alcance de todo el mundo. No obstante, pueden llegar a encontrarse ofertas si se hace con suficiente tiempo (aunque nosotros planificamos con muchos meses y no encontramos «el chollo», la verdad). En este caso, los vuelos y transportes internos se nos fueron muchísimo de precio, principalmente porque buscábamos comodidad y no nos paramos tanto a organizar transportes más asequibles.

De cara a viajar en familia, es un viaje que, desde luego, merece la pena. Tiene tanta naturaleza, playas, cultura y otros lugares preciosos que descubrir, que nadie puede aburrirse en un país así. Como dijo mi hijo: «Este viaje es increíble, chicos». ¿Qué más puedo añadir?