Me consta que no soy la única, pero siempre me ha pasado que cuando me preguntan cuál es mi «algo» favorito, me quedo en blanco. Ni siquiera soy capaz de decidir cuál es mi color favorito, que es una pregunta que me habrán hecho más de un centenar de veces…*
Si me preguntan cuál es mi momento favorito del día, diría que tengo muchos, y que cambian según la época. No obstante, si me esfuerzo al máximo (y ojo, esto es lo máximo a lo que puedo llegar), podría reducir mis momentos favoritos del día a tres:
¿Qué encontrarás en este artículo?
1. EL INICIO
Al inicio del día hay un momento fantástico. Es el momento de salir de casa, cuando el Dragón aún duerme. Entro en su habitación, aún a oscuras. No veo nada, pero me llega su olor: ese olor a niño pequeño (ya no bebé), a mi niño, que va evolucionando con él y que le pertenece. Me acerco. Mis ojos se han acostumbrado a la luz y ya puedo verle. El contorno de su cara: sus pestañas largas, su nariz redonda, su moflete, sus labios… Si está muy dormido, le doy un beso. Le digo que le quiero.
Salgo de la habitación, aún con su olor y con una sonrisa en la cara… Abro la puerta de casa y me voy. Salgo a la calle, con una temperatura generalmente más fresca que la de casa. La sonrisa aún perdura. Mi niño…
Hoy puede ser un gran día.
2. EL REGRESO
Vuelvo en Metro, tiempo que aprovecho para escribir, leer, contactar, hablar, ver series… Y llego a su Escuela. Ese momento. Abren la puerta. Antes era un ritual: «¡Mamá!» y venir corriendo a abrazarme. Ahora depende, es una sorpresa. A veces hay carrera, a veces hay grito de alegría, a veces salta… Pero siempre… siempre… Esa sonrisa. La que te llena. La que te hace dejar atrás el mundo, cogerle de la mano y andar de vuelta a casa, dispuesta a escuchar todo lo que te quiera contar con esa alegría, inocencia y entusiasmo. Con esa sonrisa.
3. LA OTRA YO
El final del día. Cuando el Dragón ya duerme. Cuando volvemos a ser dos y disfrutamos de ello… Y, un poco después, cuando vuelvo a ser sólo una. Delante del ordenador, con proyectos, con ideas, con intereses únicos, con personas que sólo conozco yo…
La vida es tan bonita que no quiero dormir…
*…Por cierto, creo que sería un color entre turquesa y aguamarina…
…O rojo. ¡Y negro! Depende, claro…
#ElTemaDeLaSemana es una iniciativa nacida de los @PapásBlogueros para toda la blogosfera.
Dormir está sobrevalorado…
Mi momento favorito del día es cuando voy a recogerlos de clase, cuando salen, cada día más cansaditos, pero contentos de salir y de verte y gritan eso dde»¡¡¡papiii». Bueno, al enano ahora le ha dado por llamar a todo el mundo, o «caquita» o «zurullito», que no sé de dónde dianttes lo ha sacado…
El caso es que de martes a jueves vienen hasta la urbanización (vivimos a 11 km del colegio) en bus, y el enano se suele medio dormir, así que está mimoso a más no poder, y la mayor empieza con su «¿sabes qué? hoy en el colé…», y me encanta ver que aprenden y se lo pasan bien 😉
Por cierto, mi color favorito es el rojo. Y hay quien dirá «pues el mío el rojo sangre», «el mío el rojo fuego», «el mío el rojo…» ¡EL ROJO! ¡SOLO HAY UN COLOR ROJO! Lo demás, queridas amigas, no son colores…. ¡SON TONOS! Que agustico me he quedado pues…
Ese momento de reencuentro es tan maravilloso… Cuando se dan cuenta y te das cuenta de lo que os habéis echado de menos. De lo importante que sois. ♡
Y, si encima te llaman zurullito, pues claro, ya, insuperable… jejeje
Investogaré la diferencia entre tonos y colores, pero parece que tiene sentido. El rojo mola. Ya he visto The Red Woman, por cierto. El capítulo de Juego de Tronos. 🙂
http://www.desarrolloweb.com/articulos/1503.php XDDD
Aceptamos barco!! XD
Jó, qué bonito post, Julia. Es verdad que ese olorcito te da vida (luego, en la adolescencia te la quita, jajajajaja, pero ya llegaremos a eso). Para mí, mi momento favorito es el rato en el que leemos cuentos. Ya no hay prisas ni reloj, ni peleas, ni deberes…
Un besete!
Jaja… no me quites la ilusión del olorcito, Nessa… jajaja
Ay, es que esos momentos de tranquilidad sin reloj… son fantásticos. Todo se disfruta más sin reloj. 🙂
No soy capaz de encontrar un momento. NO tengo tiempo de tener momentos que disfrute como tales. Antes era el desayuno pero ya…Luego fue el rato tras acostarles pero apenas duro con los ojos abiertos. Por la tarde no hay descanso…pero en algo coincido contigo y es en los momentos de reencuentros con esas sonrisas y verles dormir. Breves pero inmensos
Al menos eso. Al menos esas sonrisas que te paras a ver, a mirar.
Verles dormir, un momento. 🙂
Tres momentos bien bonitos, y todos necesitamos de ese tercero, de soledad y recogimiento.
No podemos dejar de ser nosotros. Lo necesitamos. 🙂
Gracias por comentar!!
Me han encantado, las mamis tenemos esa «doble vida»! Yo tambien he hecho «trampa» y he compartido mis dos momentos en mi post, uno con y otro sin peque. Besitos!
Es tan necesario seguir siendo una misma… Seremos madres siempre, pero también está bien serlo sin ellos 🙂
Cada momento del día tiene su aquel, yo creo que a la mayoría nos pasa lo mismo.
Jeje, nosotros también tenemos el Dou Dou de Kico jiji.
Kiconiko mola mucho!! ♡
Coincido en tus 2 primeros momentos, aunque yo no me voy de casa mientras él duerme, si no que le despierto y le llevo a la escuela y luego corriendo a trabajar.
Y el último y 3º, para mí, es cuando me meto con mi hijo en la cama y leemos un cuento. Y después hasta que se queda dormido, momento en el que ultimamente yo también me duermo.
Así que, al final, mis mejores momentos se reducen a los que estoy con Monete.
Un besote
Y qué bonito es, ¿no, Olga? Al final son momentos tan especiales… Me alegra mucho que estemos disfrutando de nuestros hijos. Pararse a sentirlo es estupendo. Compensa esos otros momentos de locura y la sensación de que «no te da la vida» 😉
Un beso!!
Que felices somos al estar con ellos y cuanto necesitamos nuestro ratito sin ellos…es curioso creo que cuando tienes hijos aprendes a valorar la soledad, aunque los estés echando de menos! Un saludo!!
Está claro, la soledad y la independencia. Y bien que tenemos que vivirlas y acostumbrarnos, porque un día se irán!!! 😛
Qué difícil, llevo días intentando buscar ese momento…..
Me encantan tus tres momentos 😉
Un besazo
¿Difícil decidir? Por eso lo dejé en 3… uno imposible! Jaja
Me encanta, aunque vaya con trampa. El momento 2 de reencuentro es de mis favoritos 🙂
Ese momento, aunque dure poco, es fantástico 🙂
Que bonito post!! Yo tb tng esw momento al final dl dia en a n quiero dormir.. :):) beso!
Qué bien! Quizás compartamos entonces «peor momento del día», otra entrada que podrás ver… jejeje
[…] Me ha dolido entrar en la habitación de mi niño mayor y recordar que hace meses, ese era uno de mis momentos favoritos del día. Arroparle (¡Por fin me dejas! ¡Te ha costado casi 3 años!), oler su pelo, acariciar su cara, […]