Time’s up Party (Big Box): diversión asegurada [Asmodee]

Time’s up Party (Big Box) es tu juego si quieres pasar un buen rato con tu familia o con tu grupo de amigos y amigas. Y lo digo con conocimiento de causa. Algunas reuniones que hacíamos terminaban con un Time´s Up! y os puedo asegurar que la gente llora. Lloramos de la risa todas y cada una de las veces que jugamos. Es un juego que fomenta la cohesión grupal y que desarrolla diferentes habilidades. Se explica rápido y la mecánica se entiende enseguida. Perfecto, ¿no? ¡Vamos a conocerlo un poco más!

TIME’S UP PARTY (BIG BOX)

• Jugadores: de 4 a 12 jugadores.
• Edad: a partir de 12 años.
• Tiempo: entre 30 y 45 minutos aproximadamente.
• Mecánica: actuar, memoria, limitación de tiempo y por equipos.
• Editorial: Asmodee
• Autor: Petter Sarrett
• Ilustrador: N/A
• Precio: 25€ aprox. en vuestra tienda friki de cabecera u online (aquí en Amazon).

Time’s up Party (Big Box) es la última versión que nos propone la editorial Asmodee. Estas son las otras que puedes encontrar en su catálogo:

• Para niños: Time’s up Kids y Time’s up Kids 2 (Panda).
• Para la familia: Time’s up Family 1 (versión verde) y Time’s up Family 2 (versión naranja).
• Los partys: Time’s up Party 1 (versión amarilla) y Time’s up Party 2 (versión azul).
• Hace tiempo sacaron una versión Academy y otra Celebrity, pero ahora no están disponibles. Yo las he probado y son bastante difíciles (¡pero menudas risas nos echamos!).

Es un juego por equipos, con cartas, se juega en tres rondas diferentes y, esta versión, tiene un temporizador digital que suena. Un juego que me encanta, por lo que solamente puedo hablar maravillas de él.

CÓMO SE JUEGA

El objetivo del juego es ser el equipo que más tarjetas ha adivinado en total tras finalizar 3 rondas. Se juega de manera diferente a la versión de más peques. Por si no sabéis cómo se juega, aquí os dejo una reseña de Time’s Up Kids.

PREPARACIÓN

Se divide a los jugadores en dos (o más) equipos de, al menos, 2 personas cada uno. Si son pares, los dos grupos tendrán el mismo número de jugadores. Si son impares, un equipo tendrá un jugador más. Esto no afecta al juego.

Se reparten entre todos los jugadores 40 cartas y se decide qué color de la carta se va a jugar, si el azul o el amarillo. Si al leerlas hay alguna que el jugador no conoce o le parece muy difícil, puede descartarla y coger otra nueva. Una vez que todos han leído sus tarjetas, se juntan todas y se barajan formando un único montón. Se coloca el cronómetro en el centro de la mesa y se pone en la posición izquierda, que marcará 30 segundos. Se elige qué jugador va a empezar y… ¡comienza la diversión!

MECÁNICA

El juego se divide en tres rondas diferentes, aunque en todas hay que hacer lo mismo, adivinar qué palabra hay escrita en la tarjeta. Si lo conseguimos nos quedamos con ella y sumamos un punto.

• Primera ronda: el jugador que tiene el mazo en las manos comienza a describir la palabra que hay escrita en la carta. Para ello, puede decir todo lo que necesite, pero con las siguientes excepciones: no pueden utilizar palabras derivadas o con la misma raíz, no se puede deletrear la palabra, no vale traducirla a otro idioma (decir Hombre Araña para describir a Spiderman no vale), no se pueden decir palabras que suenen parecido y no se puede pasar de tarjeta. El resto de los miembros del grupo pueden decir todas las palabras que les vengan a la cabeza. Al acertar la palabra, la tarjeta se deja encima de la mesa y se sigue describiendo hasta que terminen los 30 segundos. Cuando acaba el tiempo, se pasa el mazo al siguiente jugador (de otro equipo, alternándose), que hará lo mismo. Al terminar todas las tarjetas, cada equipo contará las que ha conseguido, se apuntará en la libreta y se pasará a la siguiente ronda.
• Segunda ronda: se barajan todas las 40 cartas de nuevo. El siguiente jugador cogerá el mazo y empezará a describir lo que le haya tocado, pero esta vez con una sola palabra. Tampoco se pueden decir palabras derivadas ni en otro idioma. En esta ronda sí se puede pasar de tarjeta si no se le ocurre nada para decir en ese momento. Sin embargo, los demás miembros del equipo deberán consensuar una única respuesta, no pudiendo dar varias opciones. Cuando terminan los 30 segundos, se pasan las cartas al siguiente jugador. Al terminar las 40 cartas se contabilizan los puntos y se anota.
• Tercera ronda: Se vuelven a barajar las 40 cartas y comienza el jugador que corresponda. Esta vez no se puede hablar, habrá que describir la palabra utilizando la mímica. Se puede tararear y decir onomatopeyas. También se puede pasar de carta si no sabe cómo representarla y el resto del grupo deberá dar una única respuesta.

Si hay alguna palabra que el otro equipo duda de si se ha dicho bien o si ha empleado una palabra derivada, se puede comentar al terminar los 30 segundos, para ver si se da por válida o si, por el contrario, se vuelve a meter en el montón.

FIN DEL JUEGO

El juego termina cuando se adivina la última carta de la tercera ronda. Se anota la puntuación en la libreta y se suman los resultados de las 3 rondas. El equipo que haya conseguido mayor número de puntos ¡será el ganador del Time’s Up! Party (Big Box)!

CÓMO ADAPTAR EL JUEGO

Yo en el despacho tengo el Time’s Up! Family 1 y siempre somos dos personas (uno de los peques y yo). Pero me parece un juego con tantas posibilidades (ya os he dicho que soy muy fan) que lo he adaptado. Lo juego como si fuera el Time’s up Kids, de manera cooperativa. Elegimos cada uno 10 tarjetas (en total 20) y con el temporizador del Time’s up Kids (que dura muuuuucho tiempo) tenemos que ser capaces de adivinar antes de que se termine el reloj de arena las 20 palabras. Tened en cuenta que yo trabajo con niños/as con dificultades de aprendizaje. Pues he de deciros que a ellos les gusta mucho también. Me sirve para ayudarles a trabajar el área del lenguaje y a reforzar la lectoescritura. Os dejo aquí un enlace de cómo juego con el Time’s up Kids con niños con dislexia.

Otro modo de adaptar el juego es que, en vez de tener 40 cartas en total, a cada jugador le damos 10 cartas y, de esas, se tiene que descartar de dos. Dependiendo del número de jugadores habrá más de 40 cartas, pero eso nos asegura más tiempo de entretenimiento. También podemos, para hacerlo algo más fácil, cambiar el temporizador al modo «40 segundos» para facilitar un poco más las descripciones.

La mecánica del Time’s Up! nos puede servir en clase para repasar los contenidos curriculares. Por ejemplo, si queremos repasar los diferentes sistemas del ser humano (circulatorio, respiratorio, nervioso), podemos pedir a cada alumno que haga cuatro o cinco tarjetas relacionadas con esos temas. Después ponemos todas en común y así, entre todos, repasan los temas (esta idea nos la dio Dani Martín, neuroeducador). También nos puede servir para la clase de inglés o de otras lenguas si las descripciones las hacemos en ese idioma.

HABILIDADES Y COMPETENCIAS

Os comentaba antes que los juegos de Time’s Up tienen muchísimas posibilidades. Además de las adaptaciones que podemos hacer del juego y utilizar su mecánica, potencia muchas habilidades.

HABILIDADES MÁS ESPECÍFICAS

• Atención: es un juego en el que debes estar atento durante toda la partida. Debes prestar atención a cómo describen los demás jugadores sus tarjetas, puesto que alguna palabra clave que empleen, la podrás utilizar en la segunda ronda, donde solo se puede decir una palabra. Los tipos de atención más destacables son la sostenida ya que tengo que mantenerla durante todo el transcurso del juego y la selectiva porque debo discriminar los estímulos relevantes de los irrelevantes.
• Memoria: en este juego trabajamos dos tipos de memoria, memoria a corto plazo, puesto que en las 3 rondas se juega con las mismas palabras, debemos acordarnos de las palabras que han ido saliendo. Y memoria semántica, cuando leo en la tarjeta la palabra que tengo que describir, he de acordarme de qué personaje es o de qué significa esa palabra, es decir, tengo que emplear mis conocimientos generales.
• Lenguaje: fundamental en este juego. Trabajamos la expresión ya que me tengo que hacer entender para que los miembros de mi equipo sepan qué es lo que trato de describirles. La comprensión porque tengo que entender lo que me están diciendo para poder dar una respuesta adecuada. Tengo que tener un buen vocabulario para poder llegar de otra manera a la palabra. Y la fluidez porque tengo que producir rápidamente y de manera eficaz lo que quiero decir.

HABILIDADES MÁS GENERALES

• Velocidad de procesamiento: tenemos que ser rápidos a la hora de leer la tarjeta y de buscar ese significado en nuestra memoria para hacerlo en el menor tiempo posible, ya que el cronómetro nos da solo 30 segundos para describir y cuantas más tarjetas podamos hacer en esa ronda mejor.
• Control inhibitorio: en las rondas segunda y tercera, tenemos que controlar el impulso de responder rápidamente ya que la respuesta debe ser consensuada por todos los miembros del equipo.
• Praxias: en la última ronda, en la que debemos realizar diferentes acciones (gestos, mímica) ponemos en marcha estos procesos, que son procesos motores que hemos ido adquiriendo a lo largo de nuestra vida.

CONCLUSIÓN

Este juego nos ha permitido en mi grupo de amigos conocernos más entre nosotros. A la gente que se ha ido incorporando al grupo les ha servido para romper el hielo y sentirse más cómodos. Hemos podido ir viendo la evolución que hemos tenido como jugadores: cómo cada vez somos más rápidos, cómo tenemos ya palabras clave dentro del grupo, cómo hemos creado gestos que para nosotros ya son universales.

Como has podido comprobar es un juego muy completo, fundamentalmente por los buenos ratos que hace pasar en familia o con amigos. Pero, además, tiene un potencial enorme en el ámbito educativo. Es un juego que hay que tener muy en cuenta. No dejes pasar la oportunidad de probarlo si puedes.

Ah, y desde aquí pido a Asmodee que saquen más expansiones: ¡necesitamos cartas nuevas, lo utilizamos muchísimo!