Falta poco para las navidades y quizás estéis pensando en comprarle uno de sus primeros juegos de mesa a vuestro hijo, al de unos amigos o familiares. Hace unas semanas os contaba que nosotros habíamos traído a casa encantados el Primer Frutal y el Unicornio Destello. Entonces os conté cómo fueron las primeras partidas al Primer Frutal, que a día de hoy continúa siendo un éxito, pero claramente tiene más tirón en casa el Unicornio Destello, probablemente por ser un poco más complejo en reglas y tener el componente competitivo. Paso, por tanto, a hablaros un poco sobre este juego, que creo que es un regalo excelente para niños desde los 3 años.
Estos fueron los juegos que compré ayer en @juegoslacomarca 😍. Aunque tienen tantos y asesoran tan bien que seguro que vuelvo a por más! 😊 pic.twitter.com/27PZAR7llB
— BaM! Ocio Alternativo Familiar (@bebeamordor) September 29, 2016
¿Qué encontrarás en este artículo?
UNICORNIO DESTELLO
- Jugadores: 2-4
- Edad: 3+
- Tiempo: 10 minutos (bastante preciso)
- Editorial: Haba
- Dónde conseguirlo: online en Amazon o presencialmente en una tienda que tenga ejemplares de Haba (yo lo compré en La Comarca de Los Juegos).
El motivo por el que, cuando me encontré en la tienda delante de toda la variedad de juegos de Haba y otros adicionales, me decidí por la caja rosa chicle del Unicornio Destello, fue, por un lado, la recomendación de Tang de Naranja (aquí tenéis un vídeo de una partida completa con su hija) y, por otro, que el Dragón se encontraba en un momento de máximo interés por los números y el conteo, y este juego va al pelo para eso.
Cómo se juega (oficialmente)
La mecánica es sencilla: cada jugador elige un unicornio, el cual tendrá que ir avanzando por las casillas (nubes) lanzando un dado (azul) que le indicará si mueve una, dos, tres nubes ¡o ninguna! (en cuyo caso su unicornio se queda comiéndose un pastelito, ¡no me digáis que no es una monada!).
Las nubes pueden ser de varios tipos:
- Blancas: normales. Aburridas.
- Rosas: se tira el dado rosa y, según lo que salga, el jugador coge uno, dos o tres cristales rosas.
- Moradas: el jugador coge un cristal rosa de la caja y se lo regala a otro jugador.
- Arcoiris: avanza por éste como un tobogán, varias casillas a la vez. En casa suena «Yuuuuuu» cuando lo hacemos.
La partida termina cuando un unicornio llega a la gran nube final (donde hay cuatro cristales, que se queda). Pero ojo, no gana el que llega el primero (como en un vulgar Juego de la Oca*), sino el que, en ese momento, tiene más cristales. Se pueden contar directamente o darle la vuelta al tablero y utilizar el otro lado para ver qué unicornio tiene una fila de cristales más larga (opción mil veces más divertida, obviamente).
Cómo juegan los niños y niñas
En mi experiencia, los niños quieren jugar a este juego una y otra vez hasta que consiguen ganar o, incluso, hasta que todos los presentes han ganado alguna vez (lo cual es tiernísimo y hace que quiera comérmelos a besos todo el rato sin parar). Cada casilla o acción es interesante y tiene su emoción: poder tirar el dado rosa, elegir a quién regalar un cristal (incluso cuando sólo juegan contra una persona, porque hacer regalos mola), deslizarse por un arcoiris, llegar antes que otros a la casilla final y contar uno a uno todos los cristales. Incluso la opción de «no avanzar casilla» que siempre fastidia, ¡parece que sabe un poco mejor si el motivo es que tu unicornio se está tomando un pastelito!
He jugado, de nuevo, con niños de 2,5-4 años (y también niños de 31-69) y la experiencia es muy positiva. Las primeras veces se puede jugar de una manera más sencilla, simplemente eliminando el dado rosa, de manera que caer en una nube rosa implica llevarse un cristal, sin más.
Así empezamos a jugar con el Dragón y con 2 años y medio captó las normas fenomenal. Pero esto no tiene por qué ser así con todas/os los peques, ojo. Depende de cada una/o. Eso sí, recordándole las primeras veces qué significaba cada casilla. A las pocas semanas le introdujimos el dado rosa y lo aceptó sin problemas. Le pareció mucho más divertido así.
Aquí tenéis una pequeña muestra de la mecánica del juego y del sonido «Yuuuuu» (comúnmente efectuado por mí):
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=NU4QRUZWEHc]
Habilidades aprendidas
- Visión espacial: En primer lugar, el tablero hay que montarlo, porque es un puzle (de 3 piezas grandes), por lo que ese es el primer juego que presenta el Unicornio Destello. Además, los niños tienen que entender en qué dirección se mueven los unicornios y que siempre se mueven en la misma dirección para llegar hasta la nube final. Parece elemental, pero es algo que no es automático.
- Psicomotricidad fina: la manipulación de los unicornios, que son más pequeños que, por ejemplo, las piezas de Primer Frutal, hace que se trabaje este tipo de habilidad. Además, avanzar casillas de una en una no es trivial para un niño, ya que son movimientos cortos y precisos. También colocar los cristales uno a uno en la parte trasera del tablero implica reforzar la psicomotricidad fina.
- Comprensión de las reglas del juego: los niños aprenden a recordar (y respetar) los turnos, a tirar los dados y aplicar lo que dicen los mismos interpretando el símbolo que aparece, a seguir reglas condicionales (tirar un dado y, según la casilla, ejecutar otra acción, que puede implicar tirar otro dado), a comprender la diferencia entre «Voy el primero» y «Voy ganando» (que no es trivial).
- Análisis de la competencia: Los niños también entienden, al ser un juego competitivo, que el hecho de que a otro jugador le ocurran eventos menos positivos (que avance menos nubes, que le toque sólo un cristal o comer pastelitos todo el rato) implica que a él, comparativamente, le va mejor en la partida. Eso hace que a veces sonrían o expresen abiertamente que eso les satisface (con más o menos insidia, claro).
- Perder/ganar: Cualquier juego competitivo es una excelente oportunidad para aprender a ganar y a perder. Aprovechémosla para enseñárselo: «Yo he perdido, ¿verdad que yo no me enfado por perder? No. Yo me alegro, porque has ganado tú y ahora tú estás contento, y a mí me gusta que tú estés contento.». «Yo he ganado, ¡qué suerte he tenido! Me ha encantado jugar contigo, ¿quieres que echemos otra partida?». (Estas conversaciones son literales, sí, les hablo así a mis hijos y creo que está teniendo buenos resultados).
- Juego libre: Unicornios de colores y cristalitos rosas… ¡Como para que no se les ocurran mil juegos a los peques! Eso sí, por mi parte, cada vez que se juega, luego se cuentan los cristales para que estén todos de vuelta en la caja. Que luego se nos pierden y hay disgustos… (míos, especialmente).
- Reforzar conocimientos: matemáticas, sin lugar a dudas. No solamente el conteo, sino también el concepto de azar, el concepto de mayor o menor cantidad, e incluso visualmente ayuda al concepto de la resta, al ver la diferencia entre los cristales de uno y de otro. «Mamá, tengo dos cristalitos más que tú, voy ganando».
En definitiva, considero que este juego es altamente recomendable para niños. Como os he comentado, potencia muchísimas habilidades que creo que son de gran importancia para los peques y la dinámica es suficientemente compleja como para que tirarse una tarde jugando en bucle como me ha pasado a mí no sea un suplicio para los adultos. Yo me divierto mucho y estoy segura de que para vosotros será también una buena inversión.
Es verdad que este juego , en mi opinión es fantástico para los peques , se lo pasan estupendamente
¿Verdad que sí? 😉
Me los estoy apuntando porque dentro de nada es el cumpleaños del pequeño, que aunque haga 5 años yo creo que puede molarke tanto este como el de El Frutal. Y si no… Para Navidades. ¡Gracias!
Seguro que sí. A cualquier persona que le guste jugar al juego de la Oca, este le va a gustar 10 veces más. 😉 Y a los niños les gusta hasta muy mayores (y a muchos adultos). Así como el Primer Frutal se queda cortito, te digo, este es fenomenal. 😉
¡me encanta! yo es que me pierden los juegos de mesa, muchas tardes un ratito cae y ¡no me puedo resistir a las cajas tan monas de Haba!
Son geniales, verdad?? 😍
Conocía el juego de vista, pero no lo había jugado. Es muy chulo, nos lo apuntamos. Un abrazo desde Universin.
Merece la pena!! 🙂 Geniales vuestras reseñas, por cierto! 😍
Gracias, a ver si entre todos vamos culturizando a la gente, qué grandes desconocidos son todavía hoy en día los juegos de mesa para niños (y no tan niños), que no sean los típicos que están en todas jugueterías.
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[…] el Dragón cumplió 3 años, tras el éxito de sus primeros juegos de mesa (Primer Frutal y Unicornio Destello), cayeron como regalo dos más: Bellaflor y Piratas de la Suerte. Ambos han tenido una buena […]