Karma es un juego de cartas. Y los juegos de cartas molan. Y, a mí, Karma, me ha recordado a mi infancia. He jugado mucho a las cartas desde bien pequeña. En verano, nos quedábamos con mi abuela en el pueblo y, por las tardes, cuando ya no hacía tanto calor y salíamos al patio, jugábamos con ella a algún juego de cartas. Mi otro abuelo nos enseñó muchísimos solitarios de cartas. Y, ya de adulta, he seguido jugando con la baraja española.
Hoy en día, en el mercado de los juegos de mesa, hay muchísimos juegos de cartas y hay una gran variedad de temáticas donde elegir. Karma os va a resultar sencillo de jugar y seguro que encontráis más de una ocasión para sacarlo a mesa. Y no solo por la nostalgia de la infancia si también jugasteis mucho a las cartas de pequeños. Ya veréis…
¿Qué encontrarás en este artículo?
KARMA
- Jugadores: de 2 a 6 jugadores. Si queréis jugar más de 6 personas sería posible si juntáis dos barajas.
- Edad: a partir de 8 años.
- Tiempo: unos 30 minutos aproximadamente.
- Mecánica: gestión de mano, ¡toma eso!
- Editorial: Mercurio.
- Autora: Marsha J. Falco.
- Ilustraciones: Marsha J. Falco.
- Precio: 12,95€ aprox. en vuestra tienda friki de cabecera u online (aquí en Amazon).
Seguimos mostrándoos los nuevos juegos que nos trae la editorial Mercurio, como llevamos haciendo estos meses (¡y los que quedan por llegar!). Esta vez os enseñamos Karma, un juego de cartas con reglas sencillas, fácil de jugar y explicar, pero con el que pasaréis unos ratos divertidos y os reiréis un montón, ¡os lo aseguro!
El juego consta de 60 cartas, de las cuales 48 son de números (del 1 al 16, cada una repetida 3 veces) y 12 son cartas de karma. La mecánica del juego es fácil, tratar de quitarnos las cartas que tenemos en la mano y terminar con las que tenemos encima de la mesa, mientras las demás jugadoras tratarán de que no lo consigamos con las cartas especiales de Karma. Pero, cuidado, que ya sabemos que, con el Karma, ¡las malas acciones pueden volverse en nuestra contra!
CÓMO SE JUEGA
En Karma habrá muchas personas ganadoras y una única perdedora, ya que se irán eliminando las jugadoras que se vayan quedando sin cartas hasta que, al final, quede una, que será quien haya perdido. Pasemos a ver cómo se juega.
PREPARACIÓN
Se reparten tres cartas bocabajo a cada jugadora, que no podrán mirar. Éstas, se pondrán formando tres columnas separadas. A continuación se reparten otras 6 cartas a cada una, de las que tendrán que elegir 3 cartas para colocarlas encima de las que están bocabajo sobre la mesa. Las otras 3 restantes serán las que formen su mano inicial.
El resto de las cartas se dejarán en el centro de la mesa al alcance de todos las personas jugadoras para que vayan robando (en caso de que sea necesario) al finalizar su turno y, al lado, se dejará otro espacio para ir echando las cartas que se vayan jugando (montón de descartes).
MECÁNICA
Comenzará la jugadora situada a izquierda de quien haya repartido las cartas y se jugará siempre en el sentido de las agujas del reloj.
Esa jugadora pondrá en el centro de la mesa una de las tres cartas que tenga en la mano. Así, comienza el montón de descartes y donde irán poniendo sus cartas las siguientes jugadoras. Si después de echar una carta, en su mano le quedan menos de 3 cartas, deberá robar del mazo de robo hasta llegar a tener de nuevo 3 cartas en la mano.
Después de esto, pasará el turno a la siguiente persona, que deberá obligatoriamente echar encima de la que hay en el mazo de descartes, una carta del mismo valor o superior a la que ha puesto la jugadora anterior.
En caso de que no pueda hacerlo, se deberá llevar todo el montón de descartes a su mano, por lo que pasará a jugar con todas esas cartas. También existe la opción de que no quiera poner una carta superior (por su estrategia) y se quiera llevar todo el mazo.
A continuación, será el turno de la siguiente jugadora, que volverá a comenzar un nuevo montón de descartes.
¿QUÉ CARTAS SE PUEDEN ECHAR?
Como ya hemos comentado, siempre hay que echar en el montón de descartes una carta que sea del mismo valor o superior (no tiene por qué ser la inmediatamente superior). En caso de que tengamos en la mano dos cartas iguales del mismo valor, se pueden poner sin problema, no obligando esto a la siguiente persona a echar dos a su vez.
Y, también, en vuestro turno, podréis echar sobre el montón de descartes una carta de Karma. Hay 4 tipos y sus efectos son los siguientes:
- Juega carta de la mesa: si una jugadora echa esta carta sobre el montón de descartes, deberá jugar inmediatamente una de las cartas que tiene en la mesa. Esta carta de Karma reiniciaría el montón de descartes, así que se podrá poner cualquier valor numérico. En el caso de que ya no le quedaran cartas sobre la mesa, podría jugar una de su mano.
- La de abajo vuelve arriba: cuando una jugadora pone esta carta en el montón de descartes, inmediatamente tiene que coger la primera carta que se puso y ponerla de nuevo arriba en el mazo de descartes. Esta carta será ahora la que hay que igualar o superar.
- 5 o menos: si una jugadora echa esta carta sobre el montón, la siguiente persona deberá poner una carta con un valor de 5 o menos. En el caso de que no pueda hacerlo, se llevará el mazo de descartes.
- Da el montón a un amigo: cuando una persona juega esta carta, elige a cuál de todas las personas jugadoras le va a dar todo el montón de descartes. Esta carta se descarta para el resto de la partida. Seguirá jugando la siguiente persona que puso esta carta de karma. Un aspecto importante en el desarrollo de la partida es que el montón de descartes se le puede dar incluso a un jugador que ya no tuviera cartas, por lo que volvería a entrar en el juego solamente con las cartas de su mano.
En caso de que se junten sobre el montón de descartes 3 cartas con el mismo valor numérico, ya sea porque 3 jugadoras diferentes hayan ido poniéndolas consecutivamente, porque una haya echado una carta y otra persona 2, inmediatamente el mazo de descartes se elimina y esas cartas se retiran del juego. Comenzará la pila de descartes el siguiente jugador.
¿CUÁNDO SE PUEDEN JUGAR LAS CARTAS DE LA MESA?
Solamente se pueden jugar las cartas que tenemos encima de la mesa cuando se ha terminado el mazo de robar y ya no nos queden cartas en la mano. A no ser que utilicemos una de las cartas de karma que nos permita jugar en ese momento una de las de la mesa (juega carta de la mesa). Primero deberemos terminar con las 3 que hay a la vista y después las que están bocabajo.
Cuando solo nos queden las cartas bocabajo, deberemos elegir sin mirar cuál de las 3 echamos, por lo que jugaremos al azar. Si tenemos suerte, será superior a la del mazo de descartes. Por el contrario, si es inferior, nos llevaremos todo el mazo.
FIN DEL JUEGO
El juego termina de manera inmediata cuando solo queda una persona con cartas en la mano o en la mesa. Ésta será la perdedora de Karma y el resto de jugadoras serán las vencedoras.
HABILIDADES Y COMPETENCIAS
Pasemos a ver las habilidades que podemos trabajar con Karma.
HABILIDADES MÁS ESPECÍFICAS
- Planificación: con las cartas que tengamos en la mano (ya sean 3 o todas las que nos hayamos llevado del montón), deberemos ir planeando en qué orden las vamos a poder echar para quitarnos cuantas más, mejor.
- Toma de decisiones: tenemos que tomar la decisión de qué carta echar que sea en consecuencia a la planificación que nos hemos propuesto.
- Flexibilidad cognitiva: a veces alguna persona ha puesto una carta que hace que nuestra planificación inicial ya no sea posible. Entonces deberemos ser suficientemente flexibles a la hora de poder echar otra carta y cambiar esa planificación inicial.
- Tolerancia a la frustración: precisamente cuando no podemos llevar a cabo la planificación que nos habíamos hecho o cuando nos tengamos que coger todo el mazo de descartes para subirlo a nuestra mano, debemos poner en práctica esta habilidad.
HABILIDADES MÁS GENERALES
- Visopercepción: debemos ser capaces de diferenciar los números de las cartas entre sí y las cartas de karma, para saber qué habilidad tiene cada una.
- Atención: debemos estar atentos durante toda la partida, puesto que las acciones de las otras personas jugadoras van a alterar, muy probablemente, nuestras acciones futuras, por lo que debemos poner en marcha tanto la atención selectiva, por ver las cartas con las que se juegan, como sostenida, para poder aguantarla durante toda la partida.
- Coordinación óculo-manual: debemos ser capaces de poner las cartas donde estamos viendo que se encuentra el mazo de descartes. También poder coger de nuestras cartas de la mano la carta que queremos, etc.
CONCLUSIÓN
Podría parecer que Karma es un simple juego de cartas más. Me parece que los juegos de cartas nunca son uno más, en mi opinión. Siempre aportan algo diferente. Los juegos que tienen una mecánica de ¡toma eso! gustan mucho a la gente (nos gusta eso de poder fastidiar un poquito a las demás personas). La carta de karma de tener que llevarte todo el montón y poder elegir a una persona que ya se ha quedado sin cartas… es un punto a su favor.
He tenido la suerte de probarlo con un grupo numeroso (y bastante jugón) y nos reímos un montón. Porque cada vez que alguien tenía una carta de karma para echar, le devolvía la que le habían puesto a él minutos antes. Si tenéis la oportunidad de probar Karma, no lo dudéis, pasaréis un rato muy divertido.