Las reediciones suelen ser buenas noticias. Significa que un juego ha gustado, y se queda. Bugsy, para mí, es uno de esos juegos que merecían quedarse. Un juego desde 3 años con el que trabajamos la psicomotricidad y aprendemos las reglas de un juego de mesa, con unos componentes atractivos y una mecánica sencilla. Hoy os explicamos cómo es la nueva edición de Bugsy.
¿Qué encontrarás en este artículo?
BUGSY
- Nº personas: 1-2 (admitiría modo por equipos para más de 2)
- Edad: +3 años
- Tiempo:15 minutos
- Mecánica: tirar dados, colección, carreras, construcción de patrones
- Editorial: Cayro
- Autoría: N/A
- Ilustraciones: Dany Molero
- Precio: 16€ aprox. en vuestra tienda friki de cabecera u online.
El juego de mesa Bugsy es, sobre todo, sencillo y bonito. Las nuevas ilustraciones de Dany Molero y el color de la caja lo hacen más atractivo, y las caras de los gusanitos son ahora más dulces. Los colores también han cambiado, presentando ahora una gama suave y elegante, con colores muy agradables.
Aunque el anterior Bugsy era hasta 4 personas, en este podremos jugar principalmente a 2, ya que solo hay 2 gusanos. Sin embargo, la incorporación de unas nuevas tarjetas para replicar nos va a permitir jugar a un modo por equipos que, aunque no aparece en las reglas, ¡os contamos luego!
REGLAS DEL JUEGO BUGSY
En Bugsy, el objetivo es completar tu gusano antes que el resto.
PREPARACIÓN
Cada persona toma su gusano y lo deja cerca delante de sí. Los dados se dejan en el centro de la mesa. Las anillas se pueden colocar en la caja o bien sueltas en el centro de la mesa.
CÓMO SE JUEGA A BUGSY
Por turnos, cada persona lanza los dos dados y se fija primero en el dado de puntos:
- Sale una cara verde. El número de puntos indica el número de anillas que debemos poner en nuestro gusano. Entonces, miramos el el dado de colores:
- Si sale un color liso: ese será el color de las anillas que debemos poner en el gusano.
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- Si sale una flor: ¡es un comodín! Podemos elegir el color que queramos.
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- Sale una cara roja. El número de puntos indica el número de anillas que debemos quitar de nuestro gusano. Sacaremos de las últimas que hemos metido.
FIN DEL JUEGO BUGSY
Cuando alguien completa su gusano, gana la partida.
En este caso, decir que aunque no se especifica en las reglas qué significa «completar» el gusano, se puede entender que se refiere a llegar hasta la punta reforzada del gusano. En caso de que ninguna de las dos personas llegue y se hayan acabado las anillas, deberíamos medir quién ha metido más anillas: colocamos un gusano junto a otro y comparamos.
Otra opción es, para peques más mayores que sepan contar, establecer un número de anillas: 10, 15… etc.
VARIANTES DEL JUEGO BUGSY
VARIANTE CON TARJETAS COMPETITIVO
Cada persona toma un gusano y una tarjeta, y la pone por el lado que representa el gusano de su color.
Las dos personas a la vez, comienzan a coger anillas y añadirlas a su gusano copiando la referencia de su tarjeta.
Quien antes lo consiga terminar, gana la partida.
VARIANTE CON TARJETAS SOLITARIO
Se puede jugar a este juego de modo solitario, simplemente contruyendo el patrón de cada gusano, como si fuera un reto a superar.
VARIANTE CON TARJETAS POR EQUIPOS [ADAPTACIÓN]
Este modo, aunque no aparece en las reglas, sería similar al modo competitivo. Se distribuyen las personas en 2 equipos y el objetivo será copiar en el gusano el patrón de colores de la tarjeta antes que el otro equipo.
Cada miembro del equipo tendrá un rol diferente, en función de cuántas personas sean:
- Una persona deberá mirar la tarjeta de manera oculta y describir al resto de su equipo qué colores y cuántos deben ir en el gusano.
- Otra persona puede encargarse de tomar los colores de la caja y dárselos a quien construye el gusano.
- La última persona, que puede ser la misma que la anterior, será quien vaya montando las anillas en el gusano.
Todas estas acciones se pueden hacer gritando o susurrando al oído para que la dinámica sea más calmada. Quien antes lo consiga terminar, gana la partida.
VARIANTE PARA PERSONAS CON DALTONISMO
En el manual se indica que las personas con daltonismo pueden jugar solo con el dado de añadir y quitar sin tener en cuenta los colores de las anillas.
HABILIDADES Y COMPETENCIAS
El juego de mesa Bugsy tiene una serie de mecánicas y dinámicas que ponen en marcha algunas habilidades socioemocionales y cognitivas. En resumen, serían las siguientes:
HABILIDADES MÁS ESPECÍFICAS
- Visopercepción. El juego nos obliga a distinguir los símbolos del dado, detectar el número de puntos, los colores, etc. Además, hay que tomar la anilla del color correcto.
- Psicomotricidad fina. Además de lanzar el dado, que no es muy grande, hay que insertar las anillas en la cuerda de cada gusano y hacerlo con precisión.
- Monitorización. Tenemos que comprobar cuánto falta para conseguir el objetivo y, en los modos de juego que implican copiar un patrón, ir comprobando si lo hemos hecho bien y, si no, corregirlo.
- Razonamiento lógico-matemático. Lanzar un dado de puntos y otro de colores implica razonar que tenemos que unir ambos elementos y tomar efectivamente esas anillas y no otras. Además, vamos sumando anillas y, por tanto, aumentando el tamaño del gusano, y restando y disminuyendo.
HABILIDADES MÁS GENERALES
- Atención. Tenemos que prestar atención y mantener la concentración en el juego, tanto para seguirlo como para conseguir introducir las anillas adecuadas, etc.
- Coordinación óculo-manual. Para peques, con este juego trabajamos esta habilidad ya que efectivamente tenemos que tomar la anilla que hemos decidido tomar, ponerla en el sitio adecuado, etc.
- Aceptación de reglas. Lanzamos dados y tenemos que seguir lo que nos dicen, aceptamos las reglas del juego. También esperamos nuestro turno, etc.
- Tolerancia a la frustración. Puede que los dados, por azar, nos salgan siempre para quitarnos anillas y no avancemos, mientras el resto sí avanza. En ese caso, sentiremos frustración, y aprenderemos a tolerarla porque estamos jugando.
CONCLUSIÓN
El material del juego de mesa Bugsy es atractivo y muy útil. Con las reglas del juego y con las opciones nueva que nos dan las tarjetas que se han incorporado (y las que podamos inventar), tenemos un juego al que se le puede sacar muchísimo partido tanto en casa como en el aula.
Es un juego sencillo que, sin sorprender en cuanto a mecánicas, es agradable y muy fácil de sacar a mesa (o al suelo, que es donde solemos jugarlo por aquí). Además, las nuevas opciones de juego por equipos que os proponemos desde Bebé a Mordor creemos que le dan más recorrido al juego. Un juego que, sin duda, recomendamos.
