14 gadgets útiles para viajar con niños

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Gadgets para viajar con niños

Viajar con niños es una de las mejores experiencias de ocio en familia que he vivido. Lo digo así, directamente. De hecho, para muchos (para mí también), más que ocio familiar es una forma de vida. Incluso aunque no esté más que un mes al año viajando, esos 30 días le dan un sentido mayor a la totalidad de los 365. Y se puede. Claro que se puede. Porque en familia los problemas se resuelven antes y porque la tecnología ha venido para ayudarnos. Por eso, para animaros a hacerlo y compartir algunos consejos, hoy os presento 14 gadgets útiles para viajar con niños.

Antes de ir a ello, permitidme hacer un matiz. Bueno, dos. Primero: imprescindible no hay nada en esta vida. Por poder, se puede salir de viaje con un dedo arriba y una muda de ropa (bueno, vale, la muda sí es necesaria). Pero sí que hay cosas muy útiles que quiero compartir con vosotros. Segundo: aquí entendemos «gadget» en su acepción más general, no necesariamente dispositivos electrónicos como tabletas waterproof, cámaras de vídeo 4k o baterías externas ultra-high-capacity-power-bank (que hablaremos de todo ello) sino, en general, como herramientas con una finalidad particular y con una tecnología especialmente bien pensada. Allá vamos.

Gadgets para viajar con niños

14 GADGETS ÚTILES PARA VIAJAR CON NIÑOS

ELECTRÓNICA

Partiendo de la base de que todos llevamos ya el smartphone encima, y que probablemente éste ya hará buenas fotos a los peques aunque se muevan mucho (mi móvil actual lo elegí precisamente buscando buena cámara frontal para selfies y trasera), vamos a ver otros gadgets útiles para viajar con niños:

1. BATERÍA EXTERNA

Posiblemente lo que más recomiende a cualquiera que salga de viaje, especialmente con los nuevos smartphones que se les gasta la batería en nada. Más importante aún es si utilizamos GPS, datos móviles o WiFi y hacemos fotos a los niños constantemente en nuestro viaje. Para mí, un must total. Los hay de distintos tipos, pero para viajes como mínimo usaría uno de estos dos:

  • Power bank de 5000 mAh (12€, carga rápido y da como para 1’5 o 2 cargas completas, es el que yo tengo y es suficiente para los viajes) o 10000 mAh (19€, el doble). Pesan 200 gr o menos. Poquísimo. Muy ligeros.
  • Power bank «ultra high capacity» (la releche) de 30000 mAh (42€, da hasta 10 cargas y permite cargar hasta 3 dispositivos simultáneamente). Pesan más (unos 700gr).

Ya si os apetece comprar una batería que además haga otras cosas, tenéis inventos como este (22€), que incluye linterna, batería externa (2600 mAh) y báscula para pesar maletas y que no os cobren exceso de equipaje a la vuelta.

2. TABLET

Al margen de que, para muchos, la tablet sea el demonio y todas esas cosas, yo la he encontrado extremadamente útil en viajes largos. Hay veces que se nos planta necesariamente un trayecto largo dentro de un viaje y tenemos pocas formas de entretener a los peques si han de estar con un cinturón y sin poder moverse. También puede ser que, porque nos apetezca, queramos ponerle por la noche o en algún rato de parada unos dibujos animados viajeros.

También me parece recomendable, para mayores y adultos, llevar juegos en la tablet. Desde las clásicas apps para niños, hasta versiones digitales de juegos de mesa como Patchwork (gratis), Ubongo (gratis), Dobble (gratis), Aventureros al Tren: El Primer Viaje (1.59€), Potion Explosion (2’99€), etc.

Tablet o dispositivos electrónicos para viajar con niños
Esta es la «tablet» integrada del avión… vamos, para viajes largos

3. ADAPTADOR DE ENCHUFES 

Cualquiera que haya viajado fuera de España sabe que una de las cosas que pensamos muy a última hora es: «¡Ups! ¿Y en ese país valen nuestros enchufes?». Pues la respuesta muchas veces (más de las que nos gustaría) es que no. Como podéis ver en el mapa, cada región tiene su tipo de enchufe, así que no viene nada mal solucionar el problema una sola vez.

Mi experiencia es que tenemos «en algún lugar» de la casa, «algún adaptador, pero no me acuerdo de cómo era». Mi experiencia también es de comprar en el mismo aeropuerto de llegada para asegurarnos de que compramos el adecuado, pero claro, a un precio desorbitado. Solución: un adaptador universal (12€) que tenga varios tipos de enchufes, de un color bien llamativo (que destaque entre las mil cosas que llevamos cuando viajamos con niños) y guardado siempre en la caja de los candados, pasaportes y demás cositas de viaje.

Mapa Mundo enchufes países adaptador

Mapa orientativo de «Enchufes por el mundo» (fuente: Australian Way) 

4. WIFI PORTÁTIL O TARJETA DE DATOS MÓVILES

No hace mucho que empezamos a incorporar de manera obligatoria este gasto (inversión) a nuestro presupuesto viajero y os aseguro que, desde entonces, no ha faltado en cada viaje. Disponer de datos móviles durante el viaje es una maravilla, pero, si viajas con niños, aún más. Si la familia te reclama información o, sobre todo, fotos, tener datos en el mismo sitio en el que la haces y poder mandarlo es hacerles felices.

Sin embargo, lo que más nos ha hecho apostar por esta inversión es que la mayoría de smartphones tiran de datos móviles para hacer uso de las apps de geolocalización. Llevar un GPS siempre encima, estés donde estés, y saber en qué calle estás (aunque esté escrito en un alfabeto distinto) y dónde tienes que girar para llegar a un restaurante cercano o a tu propio hotel, es impagable. Especialmente si vas con niños cansados.

¿Cómo conseguirlo? Nosotros nunca hemos usado WiFi portátil (más útil para conectar varios dispositivos, aunque es un cachivache más a llevar), pero hay gente que lo prefiere sin duda. En nuestro caso, más bien hemos optado por la opción de comprar una tarjeta de datos móviles de cada país según cómo lo recomendaran en guías y blogs. Por ejemplo: en Bolivia y en Vietnam lo compramos en un puesto callejero, pero en Japón la solicitamos antes de viajar.

5. VIDEOCÁMARA Y CÁMARA INFANTIL

Ya sé que he dicho que nosotros llevamos el móvil para hacer fotos, pero, además de una buena cámara réflex o similar que nos guste para hacer fotos especialmente buenas (sobre todo si no porteamos bebés el 80% del tiempo) hay dos maquinitas que sí veo muy útiles, aunque personalmente no las tengamos aún: una buena videocámara y una cámara para niños.

Está claro que las fotos son un recuerdo maravilloso, pero en el caso de los niños, si hacéis buenos montajes (cortos, de tomas sencillas pero significativas), en los que se les vea moverse y, sobre todo, hablar con esa vocecita y esas palabras acordes a su edad, sus expresiones inolvidables y sus gestos encantadores… Una cámara de vídeo en condiciones os guardará esos recuerdos para siempre.

La cámara infantil es una forma de implicar a los propios niños en el viaje, algo que apoyo incondicionalmente como ya expliqué en el post sobre cómo gamificar un viaje con niños. Mi única recomendación o restricción es que fueran digitales, porque el dedo disparador incontenible puede ser peligroso de no ser así. Las hay muy simpáticas que incluyen también cámara frontal para hacer selfies (69€), que ya os podéis imaginar el efecto. O incluso de superhéroes como Los Vengadores (49€) o Wonder Woman (24€).

En 2019 hemos hecho un viaje a Tailandia y Camboya en el que hemos llevado cámara de fotos para los niños. Tras consultar distintas fuentes, nos decidimos por adquirir una cámara que nos pareció indestructible por dos terremotos (y la experiencia nos ha dado la razón). La calidad de las fotos no es la mejor, pero se lo pasaron genial con todas las opciones que tenía. Se trata de esta que tenéis en Amazon por 35€ (no la hemos visto en otras tiendas). Aquí la podéis ver:

cámara de fotos para niños
Aparece un niño en primer plano (el Tritón, 3 años) mirando a la cámara a través de una cámara de fotos de color brillante celeste y naranja. De fondo, otro niño más mayor (5 años, es el Dragón) de espaldas, asomado a una barandilla mirando al mar.

6. ALMACENAMIENTOS Y MEMORIAS

Yo creo que esto es algo que no hace falta decir, pero, por si acaso, no digáis que no os lo advertí. ¿Recordáis el número de cientos (o miles) de fotos que hicisteis en vuestro último viaje? ¿Os habéis fijado en cuántas fotos les hacéis a los niños desde que nacieron? ¿Os imagináis ambas cosas implosionando en una sola memoria? Vale, pues mi recomendación es que compréis varias tarjetas de memoria.

El que avisa no es traidor. Además de las propias de vuestra cámara de fotos (la típica es la SDHC, que podéis aprovechar para comprar de 32GB –14€-), yo siempre llevo al menos un pen drive de 16 o 32 GB (10€) donde hago copias de seguridad si el viaje es de varias semanas. Perder las fotos de un viaje puede ser muy dramático.

SEGURIDAD

7. PULSERAS IDENTIFICATIVAS

Ya os hablé de esto cuando os di consejos para viajar a Vietnam con niños. Se trata de una pulsera impermeable con cierre a prueba de niños en el que se puede escribir el nombre y el teléfono (o lo que consideréis) para que lo tengan siempre encima. Especialmente útil en etapas en los que se separan de ti y les parece muy divertido salir corriendo cuando tú te lanzas a por ellos…

Aunque, en mi experiencia, nunca los he necesitado porque, de viaje, no me he separado de ellos ni dos metros, creo que es una inversión mínima y un «por si acaso» imprescindible. Las que nosotros tenemos son de Infoband (5€) y nos han ido fenomenal durante años, entre otras cosas porque no se las pueden quitar ellos y sirven desde antes de los 2 años. También las hay más complejas con información escaneable por móvil (26€), quizás más adecuadas para niños más mayores (por el tamaño) con alergias o situaciones médicas particulares.

Pulseras identificativas de seguridad para niños Infoband

8. POTABILIZADORA DE AGUA

Aquí más que una recomendación, hago un recordatorio y una advertencia: fuera de vuestro país (e incluso fuera de vuestra comunidad autónoma, a veces), bebed agua mineral o cualquier otra bebida. Aprovechad para probar la cerveza local, el café local, las bebidas locales, la leche local (bueno, eso menos… a mí siempre me cuesta), etc. Con los niños, precaución doble: siempre agua mineral. ¡Incluso para lavar los dientes (nos hemos ahorrado mucha diarrea del viajero así…)!

De todas maneras, por si a alguien le interesa, hace ya años que nos encontramos en los caminos con viajeros que nos recomiendan encarecidamente el uso de botellas potabilizadoras de agua. Se supone que eliminan el 99’99% de bacterias y demás microorganismos que pudieran afectarnos, sobre todo de arroyos y aguas corrientes. La marca más conocida y quizás más usada es Lifestraw (39€), que cuenta además con una versión para niños (45€).

9. NAVAJA MULTIUSOS + USB

Lleva una navaja cerca de un niño no es que sea la cosa más segura del mundo, pero llevar una navaja multiusos (lejos de los niños) es extraordinariamente práctico. Especialmente, por supuesto, si es una navaja buena que corta de verdad, con tijeras, con alfiler y con todo lo que trae una multiusos buena. Se puede utilizar incluso cuando a los peques les entra hambre y queremos abrir algún paquete de comida, o para sacar astillas con el alfiler, limar o cortar una uñita de mini-Lobezno o hacer arreglos improvisados.

Recientemente un gran amigo nos regaló una Victorinox (de lejos, la más conocida por su calidad) y estamos muy contentos con ella. Lo curioso es que esta marca tiene versión especial para niños (18€, útiles para pequeños exploradores) e incluso versión con linterna LED y USB de 16GB (80€). A fin de cuentas, ¡también podemos tener emergencias de falta de datos!

ALMACENAJE / PORTEO

10. MOCHILA PORTABEBÉS 

Hace poco en #ElLadoPositivo de Mamá se escribe con K, contestaba a la pregunta de cuál es el accesorio que me había resultado más útil en mi maternidad y, sin duda, es la mochila ergonómica. A lo largo de estos años he usado varias, aunque personalmente me quedo con el Caboo (54€) para los primeros meses y la Ergobaby (105€) o la Manduca (99€) en adelante.

Confesión: hace poco vi una mochila ergonómica por menos de 20€ y, como estaba buscando una «accesoria», la compré. El diseño es similar a las demás (siempre con el bebé de cara a nosotros y conservando la postura de «ranita» de las piernas) y para niños pequeños (5-10kg) va perfecta y ocupa menos, pero claramente el extra que se paga por las marcas de calidad merece la pena para pesos superiores e inferiores. No obstante, si os interesa, el modelo que tengo yo es este (19€, aunque a mí me costó 14€).

Porteando con mochila ergonómica en Japón

11. MOCHILA AUXILIAR PLEGABLE

Cuando vas con niños a dar una vuelta desde el alojamiento y de pronto empiezas a comprar alguna cosa de picoteo, o quizás un juguetito, o una revista y otras cosas que no se terminan pero que hay que guardar «para luego», llevar mil bolsas es algo incómodo. También puede suceder lo contrario, que salgáis de casa con un montón de comidas o cosas «fungibles» que se van gastando y es ideal llevar una mochila que, una vez terminado todo, se pueda guardar en un bolsillo y liberar espaldas.

Pues bueno, para esas cosas, las mochilas ultra-compactas están fenomenal. No ocupan nada, no pesan y te salvan de apuros e incomodidades. Súper recomendables. Las tenéis con varios bolsillos e impermeables (9€), o podéis acercaros a un Decathlon o similar, que las encontráis simples y baratérrimas (2€). También os valen las típicas que os dan de propaganda o, como esta maravillosa de Madresfera que vivió interesantes aventuras con ciervos hambrientos en Japón.

12. SILLA DE PASEO PLEGABLE

Ideal para esas edades incómodas en las que portear ya no es una opción factible por el peso del niño, pero que aguantan la mayor parte del tiempo andando sin problemas. También ideal para furgoneteros, caravaneros y excursionistas con requerimientos de espacio pequeño, o bien para viajes a países en los que unas ciudades son muy aptas para carritos y otras no. He visto sillas plegables de varios tipos y, aunque no tengo ninguna, en más de una ocasión las he deseado. Muy mucho. Ejemplo, la Gb Pockit (4’3kg), que aguanta niños hasta 17kg, aunque no es especialmente barata (159€), pero para la tecnología que tiene, está fenomenal y la recomiendan nuestros amigos viajeros de La Furgoteta, que es garantía total.

13. ORGANIZADOR PARA COCHE 

Esta es otra de las compras que mejor me vino para la época en la que viajaba atrás con los peques. Es un organizador con bolsillos para llevar todos los cachivaches que se te ocurran para entretener al bebé o al niño (y a ti misma) durante un viaje largo en coche. Galletas, tortitas, biberón de agua, botella, pañuelos, toallitas, sonajeros, cuentos… Todo ahí. Para cuando son más mayores y ya van a favor de la marcha, hay algunos que, aunque ya no vayas tú atrás (o sí), puedes ponerles la tablet bien sujeta a modo de TV porque tienen un bolsillo ideado para ello (dos por 14€). Para esa etapa algunos también te protegen la tapicería de patadas intempestivas.

14. MOCHILA DE TREKKING / MONTAÑA

Para nosotros, en viajes largos, llevar una maleta de ruedas no es una opción. No sé si os pasa a los demás, pero tenemos la necesidad de tener siempre accesibles miles de bolsillos, especialmente ahora que viajamos con niños, para tenerlo todo a mano. Pero todo, todo: pasaporte, mapa, botella de agua, biberón, doudou, algún juego, gafas de sol, protector solar, pañales, toallitas, gorros… De hecho, ahora ya, para salir de paseo durante el día, también llevamos mochila de trekking con un millón de bolsillos. Nosotros solemos ir a Decathlon (50€) porque lo podemos probar cerca, pero lo que sí os recomendamos si vais a comprar es que tenga bolsillos accesibles por arriba y por abajo, que tenga muchos y, sobre todo, que sea ligera y grande (aquí tenéis una por 23€).

Mochila de Trekking Forclaz Air 30 +
Se ve poco, pero de viaje o se portea bebés o se lleva mochila (aquí Forclaz Air 30L +)

OTROS IMPRESCINDIBLES LÚDICOS QUE NO DEBES OLVIDAR

Te recomiendo que eches un vistazo a estos trucos para viajar con niños de La Sonrisa Despeinada. Además de eso (o insistiendo en ello), sin duda, para mí, imprescindible para viajar:

  • Una bonita y cómoda selección de juegos de mesa para viajar en familia. Si no salgo a la calle sin un juego en el bolso, ¿cómo voy a salir de mi ciudad sin ellos?
  • Cuaderno de colorear y con pegatinas. Y colores. Y pegatinas extras. Muchas pegatinas. Montañas de pegatinas. Para bebés y para mayores. Pegatinas para todos.
  • Tu pasaporte lúdico especialmente diseñado para el país al que vas.
  • Uno o más cuentos. A ser posible, resistentes a las inclemencias del tiempo, de la mochila, y de las manos sucias de bebés y niños exploradores. También son útiles Los Minis, que son muy pequeñitos y muy portables, aunque menos resistentes.
  • Figuras de cartón/plástico con agujeros para bordar con lana (sin aguja, 15€): horas entretenidos, en serio. Un auténtico descubrimiento que hicimos en Japón.

Y, por supuesto, ganas de pasarlo fenomenal, kilos y kilos de paciencia y todos los sentidos preparados para recibir las nuevas experiencias e impregnaros de nuevas culturas: matices, olores, sabores, sonidos, texturas e imágenes… Todos formarán parte de vuestros recuerdos en familia. Y no hay nada mejor que eso. Es lo único que nos queda. Momentos inolvidables por el mundo con las personas que más queremos de nuestro mundo.

7 COMENTARIOS

  1. Pues nosotros viajábamos mucho en plan mochilero, pero con hijos no somos muy atrevidos. Solo de pensar todos los trastos que tengo que llevar me da pánico! Fuimos a Menorca con el niño cuando tenía dos años y genial. Este verano queríamos mirar de ir a Cerdeña o por allí. Seguiré tus tips!
    Un abrazo!

  2. Me parece un artículo completisimo!!
    Felicidades Juls. Es súper interesante y útil.
    Me servirá para los viajes con el sobri!
    Super curioso lo de coser figuras de plástico. Lo quiero ya!
    Gracias!

    • Muchas gracias! Lo de las figuras de plástico es brutal, en serio. Al menos los míos… Entretenidos ratos larguísimos, y además va fenomenal para la psicomotricidad fina! 😍

  3. Hola!

    Nosotros siempre llevamos los «MINILIBROS PARA SOÑAR IMPERDIBLES» de la editorial Kalandraka. Empezamos con el 2 (era el que tenían en la tienda :D) y ya tenemos hasta el 4!!

    Salu2

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